¿Tienes una empresa? Sabías que el Gobierno de México ya otorga incentivos si tu empresa cubre con el concepto de Responsabilidad Social Corporativa: gestión de los impactos que genera tu actividad comercial de forma económica, social y medioambiental
Dichas acciones se han implementado para aminorar los impactos negativos de las actividades comerciales y aprovechar la apertura a nuevos mercados más sustentables que atraigan mayor inversión, transferencia de tecnología, cuidado ambiental, desarrollo y seguridad social.
Beneficios de cumplir con la Responsabilidad Social Corporativa
Reducción en el pago de impuestos
En primera instancia queremos aclararte que esta no pretende ser una vía para evadir impuestos, por lo que tienes que cumplir con ciertos lineamientos, entre ellos el principal es ser una empresa verde.
Además, tus procesos deben ser orientados a preservar el medio ambiente mediante el uso de energías renovables, el uso de materiales amigables con el ambiente, control de contaminantes, reciclaje y reusó son algunos de estos.
Incremento de la rentabilidad
Ser ecológico puede resultar económico ya que reduces costos en los gastos de energía y productos de un solo uso.
Aunado a esto, si implementas áreas verdes o muros en tu empresa, tan solo en el gobierno de la Ciudad de México, la propiedad aumenta hasta un 10.5% y la reducción del impuesto predial alcanza un 10%.
Seguridad
Aquellas empresas certificadas como verdes tiene menor probabilidad de tener una sanción legal en cuanto a las normas ambientales establecidas por los gobiernos.
A su vez, esto genera credibilidad y confianza a tus clientes e inversionistas porque generas la percepción de que eres responsable y respetas las leyes.
Condiciones laborales sanas y atracción de talentos
El hecho de que tu empresa esté comprometida con la Responsabilidad Social Corporativa no solo hará que tenga una percepción más positiva para tus clientes potenciales, sino también a la hora de reclutar talento humano.
Cuando implementas estas políticas a largo plazo se genera una simbiosis entre tu empresa y el entorno que se preocupa por lo social y ambiental.
Ello se traduce en beneficios para todos: tú vendes más, los demás te perciben de forma positiva y el mundo mejora a la par que se desarrolla.